CRONICAS DEL "CHINO" REINOSO.- 1
Esta pasión por la hípica que nació en mi siendo casi un
ninho, a raiz del suceso que significó el inolvidable Rio Pallanga con su
extraordinaria campanha (1955-56) en las pistas y lo trágico de su final, en el
antiguo Hipódromo de San Felipe, dejó marcada como con fuego el indeleble
recuerdo de "El Expreso" y para siempre el gusto por la crianza del
pura sangre de carrera.El ninho que era en esa época se nutría de hípica,
especialmente con la página que aparecía en la tercera de La Crónica (edición
nocturna).Se venía un internacional, 1955 si mal no recuerdo y Río Pallanga era
el favorito. Como era un punterazo, marcó el paso, pero súbitamente se mancó.
Se hizo de todo para que siguiera viviendo, incluso lo levantaron en vilo para
que no pisara (dentro de su box), pero todo fue en vano. Era una
manhana,recuerdo, cuando mi padre entró a mi cuarto y me anunció que el crack
había muerto.Fue la primera vez que lloré por un animal, al que nunca había
visto y al que sin embargo quería como a alguien muy cercano.
Recuerdo aun las visitas inopinadas al antiguo Haras Chillón
para ver de cerca a Postin, a Sherbet, Granadero y a Pertinaz.Incluso una vez
coincidió que era época de montas y que sacaron a Pertinaz para que montara una
yegua.Fue un espectáculo, la yegua repartía patadas y Pertinaz, que era enorme,
lo único que quería era montársela, lo que logró después de recibir una sarta de
coces por todos lados.
Después siguió mi ninhez. Había un amigo, de la edad de mi
hermano mayor, Gustavo (Guti) Velásquez que sabía de hípica de una manera
increíble. Recuerdo que una vez le conté que don Claudio Fernández Concha había
traído a Tourbillon como padrillo a su haras La Cabanha. Me dijo que
estaba loco, que toda la plata del mundo no bastaría para traer a esa leyenda y
yo no paraba de porfiar.Eran mis pininos en la hípica y efectivamente estaba
errado, era a Turmoil a quien había traído y el me lo hizo ver.Turmoil que
había ganado el Gran Prix de Paris, era una esperanza para nuestra hípica, lo
mismo que Datour, también por Tourbillon y que tuvo una destacada aunque no
estelar campanha en el desaparecido haras Jesús del Valle. Ya que hablamos del
Dr.Fernández Concha, diré que le faltó un poco de suerte en la crianza. Hizo
todos los esfuerzos por conseguir un padrillo estelar, pero no lo logró.Parrot,
que era hermano entero de la extraordinaria Pamplona, y "parado de
manos" al decir de Guti, no se acercó a su célebre hermana mayor.Después
tuvo a Lohengrin-bastante bueno habría que reconocer-ya que dió muy buenos
productos, entre ellos al extraordinario Leviatán que era hijo de una yegua
argentina de nombre Carlita y que tenía un desarrollo de carrera aplastante.Aun
recuerdo con fruición la vez que galopó al resto de cracks que lo acompanhaban
en una carrera clásica y a los que arrasó al final ganando "por una
cuadra".Leviatán era de esos monstruos que ganaban a lo Secretariat y
dejaba a muchos "fuera de poste".(continuará)
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